En la actualidad, los trabajos de oficina implican menos actividad física, debido a los avances tecnológicos. Sin embargo, este estilo de vida produce sedentarismo. Asimismo, una vida alejada de un ritmo activo lleva al tabaquismo, obesidad y acelera la aparición de distintas enfermedades como la del síndrome del trasero muerto.
Este mal se trata de la amnesia gluteal que se presenta cuando el músculo deja de funcionar correctamente, se atrofia y pierde fuerza, ocasionando dolores en la espalda baja, la cadera, las rodillas y los tobillos, debido a los intentos naturales del cuerpo por tratar de compensar dicho desequilibrio.
Esta enfermedad es frecuente cuando se pasa mucho tiempo sentado. "Al estar mucho tiempo sentado, el flexor de la cadera se acorta más y más, lo que lleva a que los músculos de los glúteos no se activen o no trabajen de la forma más óptima que deberían", dijo a la revista Self Chris Kolba, fisioterapeuta de la Universidad Ohio.
Una forma de detectarlo es a través de la prueba de Trendelenburg, el cual consiste en levantar una pierna y si la pierna se hunde en ese lado, es señal de una atrofia en el glúteo medio del lado opuesto. Asimismo una manera de prevenir esta atrofia es levantarse de la silla al menos cada 20 minutos y realizar movimientos para activar los glúteos.
Levantarse y caminar, estirar las piernas, para eso se puede activar una alarma en el celular cada hora para flexionar los músculos en intervalos regulares, con el fin de posicionarse en la parte lateral a ésta y la pierna que quede del lado de afuera es la que realiza el movimiento de abrir y cerrar. Es importante trabajar este músculo con el fin de evitar padecer el síndrome y ayudar a formar una cavidad que brinde un buen estilo a los glúteos.
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