La revitalizante ducha matutina puede regarnos con algo más que agua fresca, según un estudio que asegura que los cabezales de ducha son un nido de bacterias potencialmente dañinas para los sistemas inmunológicos más débiles. Científicos de la Universidad de Colorado llegaron a esta conclusión tras analizar 45 cabezales de ducha procedentes de 5 ciudades y 4 pueblos de siete estados de EE.UU. El examen mostró que un 30 por ciento de esos aparatos albergaban niveles significativos de Mycobacterium avium, un patógeno ligado a las enfermedades pulmonares que suele infectar a las personas con problemas en su sistema inmunológico.