Terminó el certamen continental y nuestra selección nos llenó de orgullo por su buen juego. Toque, fútbol y sobre todo juego limpio. El tercer lugar fue un premio consuelo que, aunque no fue el título, sirve para darle las gracias a los jugadores y al profesor Ricardo Gareca.
Pero hoy , en la final que ganó Chile a Argentina y en el partido en el que se coronó campeón de la Copa América 2015, la selección nacional sumó un premio más: el premio Fair Play al juego limpio. Durante la premiación, las pifias de los hinchas chilenos no se hicieron esperar al escuchar el nombre de nuestro país en el Estadio Nacional de Santiago.
Perú demostró que se puede jugar bien, ganar y sobre todo (a diferencia de otros) sin hacer trampa. Gracias muchachos.