Más de un centenar de damnificados, 195 afectados, 39 casas dañadas, seis inhabitables, así como 59 embarcaciones averiadas es el saldo que dejó el fuerte oleaje en el interior del país.
Trujillo, Chimbote y localidades del sur chico, como Cañete y Mala, son las más afectadas.
Ayer, las 40 familias afectadas de la zona costera de Chimbote se quejaron, debido a que hasta el momento no han recibido ayuda de las autoridades locales. Nosotros mismos hemos tenido que limpiar nuestras casas, dijeron tras clamar por ayuda.
Pidieron enviar carpas, frazadas, medicinas y personal de salud para realizar chequeos médicos, pues temen la proliferación del dengue y otras enfermedades.
En tanto, una decena de familias del sector la Florida Baja abandonaron sus casas que fueron inundadas tras el maretazo del último jueves. Temen otro fenómeno similar.
En Trujillo, el distrito de Víctor Larco fue el más afectado. Diecinueve casas asentadas en el litoral de Buenos Aires quedaron inhabitables y las 85 personas damnificadas aún no recibían ayuda del municipio ni de Defensa Civil. Solo lograron obtener frazadas y carpas de algunos candidatos. Ellos evalúan dormir en una iglesia ya que sus vidas corren riesgo.
De otro lado, seis pescadores de Chincha (Ica) arriesgan sus vidas en alta mar al permanecer al cuidado de las 25 embarcaciones que permanecen a un kilómetro y medio de la orilla. Con ellos estamos en constante comunicación, solo estamos esperando que pase el oleaje para traer las embarcaciones a la orilla y que regresen los pescadores, dijo el administrador de la caleta de Chincha, Pedro Gonzales.
