La Justicia uruguaya procesó a tres personas, dos con prisión, acusadas de un delito de lavado de dinero relacionado con el "caso Montesinos", en referencia al exasesor presidencial peruano Vladimiro Montesinos, causa por la que en 2014 hubo ya en Uruguay dos imputados, informaron hoy fuentes oficiales.
"Acá había una ruta de dinero proveniente de empresas peruanas de fachada fluvial que formaron el grupo de narcotraficantes", confirmó hoy a Efe el juez del crimen organizado Néstor Valetti.
Montesinos fue asesor del expresidente peruano Alberto Fujimori (1990-2000) y enfrenta en su país una megacausa por narcotráfico, corrupción, enriquecimiento ilícito y lavado de activos.
Según el magistrado, "de acuerdo a la información proporcionada por Perú", Montesinos hizo un acuerdo con los cárteles por el cual por un 15 % de comisión permitía la utilización del territorio peruano.
En junio de 2014 fue encarcelado en Uruguay el empresario uruguayo Sergio Hermida, propietario de una casa de cambio de moneda en Montevideo a través de la que presuntamente "blanqueó" más de un millón de dólares que le fueron enviados desde Perú por dichas empresas vinculadas al narcotráfico.
Según Valetti, con el transcurso de la investigación ya son cinco los procesamientos en este expediente en el país suramericano.
En un primer momento, cuando se procesó a Sergio Hermida y por asistencia para el lavado también a su esposa -que posteriormente fue excarcelada-, se comprobó la existencia de 256 giros provenientes de Perú a la cuenta personal de Hermida, de lo cual están documentadas totalmente al menos ocho transferencias.
"Estamos hablando de una cantidad muy voluminosa de dinero que luego retornaba a través del cambio Shernu del cual eran dueños Hermida y Gonzalo Núñez a una cooperativa de créditos en Buenos Aires y de ahí retornaba el dinero a los narcotraficantes, a las empresas peruanas", agregó el juez del crimen organizado.
Asimismo, prosiguieron las investigaciones con la documentación que se incautó en los allanamientos del local del cambio y se pudo comprobar la existencia de una segunda ruta del dinero que comenzaba en un banco de Perú y pasaba por otro de Madrid, donde Núñez tenía una cuenta abierta a través de una sociedad.
Es por ello que éste último hacía llegar esa cantidad al cambio Shernú, que por un mecanismo interno pasaba a la cooperativa de crédito argentina y de ahí salía otra vez para Perú.
En este sentido, ahora se dictó el procesamiento con prisión del socio de Hermida, Gonzalo Núñez, y de un oficial de cumplimiento de la casa de cambios, así como por asistencia, a la cuñada de Hermida, que también cooperaba con las actividades.
Finalmente, esta mujer no fue procesada con prisión al cumplir "un papel más accesorio" que representa "un delito excarcelable", mientras que los demás son "inexcarcelables", matizó.